ALGO SOBRE EL EVANGELIO DE MATEO, EL QUE FUE PUBLICANO. (del 1 al 7)

 


ALGO SOBRE EL EVANGELIO DE MATEO, EL QUE FUE PUBLICANO.

Ya no sois extranjeros ni forasteros, sino que sois ciudadanos del pueblo de Dios y miembros de la familia de Dios. Estáis edificados sobre el cimiento de los apóstoles y profetas, y el mismo Cristo Jesús es la piedra angular. Por él todo el edificio queda ensamblado, y se va levantando hasta formar un templo consagrado al Señor. Por él también vosotros os vais integrando en la construcción, para ser morada de Dios por el Espíritu. (Ef 2, 19-22)

Algo para saber del evangelio:

En aquel tiempo, Jesús vio a un hombre llamado Mateo, sentado a su mesa de recaudador de impuestos, y le dijo: "Sígueme". Él se levantó y lo siguió. Después, cuando estaba a la mesa en casa de Mateo, muchos publicanos y pecadores se sentaron también a comer con Jesús y sus discípulos. Viendo esto, los fariseos preguntaron a los discípulos: "¿Por qué su Maestro come con publicanos y pecadores?" Jesús los oyó y les dijo: "No son los sanos los que necesitan de médico, sino los enfermos. Vayan, pues, y aprendan lo que significa: Yo quiero misericordia y no sacrificios. Yo no he venido a llamar a los justos, sino a los pecadores".( Mt 9, 9-13)

Mateo, llamado con amor, por amor y para amar nos presenta en su evangelio: “La Opción fundamental de Jesús”. La Opción de Jesús no fue por los pobres, sino por todo lo humano: los pobres y los ricos, los justos y los pecadores, por los hombres y por las mujeres, por los débiles y los fuertes, por os judíos y por los gentiles. Y como todos somos pecadores, tanto los justos como los buenos, también vino por ellos. Vino por todos, a todos llama, a todos perdona, a todos salva y santifica, pero no a fuerzas, no manipula, no engaña, no obliga, en su Mensaje hay una invitación: si tu quieres. “Conmigo o contra mí, el que no junta desparrama (Mt 12, 30)

El Evangelio de Mateo es fruto de la predicación oral, luego después de treinta años, más luego, lo puso por escrito, cuando había todavía muchos testigos de los acontecimientos de lo que había sucedido desde el principio. Para Mateo Jesús es Emmanuel. El el cumplimiento de las promesas del Antiguo Testamento. Engendrado en el vientre de virginal de María y que recibió el nombre de Jesús que significa: Dios salva (Mt 1, 20- 25) Nos dice que Jesús nació en Belén de Judá y fue manifestado a los reyes magos que conducidos por la Estrella encontraron al Niño y a su Madre  y lo adoraron (Mt 2, 1-11) Después perseguido por Herodes huye a Egipto, dejando atrás la matanza de los niños inocentes. (Mt 2, 16) Todo esto Mateo lo recibió de la misma Madre de Jesus, de María.

 

Luego nos habla del cumplimiento de las profecías: Juan el Bautista, que habla en el desierto y predica un bautismo para el arrepentimiento para preparar  el camino de Cristo el Mesías que fue bautizado por Juan. (Mt 3, 1ss) Después de su bautismo Jesús es llevado al desierto para prepararse para su misión. Después de ser tentado por el diablo y vencerlo, se va a invadir los terrenos del Maligno para liberar a los oprimidos por el diablo y comienza su predicación diciendo: Desde entonces comenzó Jesús a predicar y decir: «Convertíos, porque el Reino de los Cielos ha llegado.» (Mt 4, 17)

¿Quién Jesús para Mateo?

Es Dios verdadero y es hombre verdadero (Mt1, 2- 25) Es el Cristo, el Ungido con el Espíritu Santo (Mt 3, 16) Ungido para ser Salvador, Maestro y Señor de todos. (Mt 16, 16) Mateo presenta la carta Magna de Jesús, donde encontramos el Ser y el actuar de Jesús, el cómo vive Jesús y cómo deben vivir todos los discípulos del Señor: «Bienaventurados los pobres de espíritu, porque de ellos es el Reino de los Cielos. Bienaventurados los mansos , porque ellos poseerán en herencia la tierra. Bienaventurados los que lloran, porque ellos serán consolados. Bienaventurados los que tienen hambre y sed de la justicia, porque ellos serán saciados. Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia. Bienaventurados los limpios de corazón, porque ellos verán a Dios. Bienaventurados los que trabajan por la paz, porque ellos serán llamados hijos de Dios. Bienaventurados los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el Reino de los Cielos. Bienaventurados seréis cuando os injurien, y os persigan y digan con mentira toda clase de mal contra vosotros por mi causa. (Mt 5, 3- 11)

Enseguida habla de los discípulos diciendo: “Ustedes son la sal de la tierra y la luz de mundo” (Mt 5, 13) La luz no debe de ser escondida, sino debe ponerse en la parte alta para que alumbre a todos los de la casa (Mt 5, 15) Jesús, según Mateo, vivió sometido a la Ley de Moisés, pero la superó (Mt 5, 17) Al mostrarnos el verdadero sentido de la Ley: el amor y el servicio a Dios y a los hombres. (Mt 20, 25- 28) Y nos dejó sus Mandamientos como su legado (Mt 5, 19) Han oído que se ha dicho: “No matarás”. Pero, Yo les digo… (Mt 5, 21) Y nos habla de la importancia del amor y la reconciliación para el culto (Mt 5, 23) Pero dijo a sus discípulos: Si vuestra justicia no supera la justicia de los fariseos, no entrarán en el Reino de Dios” (Mt 5, 20). Jesús superó la ley de Moisés porque es Dios con nosotros (Mt 1,23)

Para Mateo, Jesús se opuso a la Ley del Talión y nos propuso la Ley del Amor (Mt 5, 38)  Para Mateo, Jesús no se opuso a la Ley, sino a los fariseos y a los escribas que se habían sentado en la cátedra de Moisés: Dicen, pero, no hacen. (Mt 23, 1- 9) Son ciegos que guían a otros ciegos (cf Mt 15, 14) Se opuso rotundamente contra el divorcio, contra el adulterio y la prostitución. (Mt 5, 27- 32) Pues yo os digo: Amad a vuestros enemigos y rogad por los que os persigan, (Mt 5, 44) Porque Dios ama a justos  y pecadores (Mt 5, 45) “Sed perfectos como vuestro Padre celestial es perfecto”. (Mt 5, 48)

Jesús enseñaba las tradiciones del pueblo sobre la limosna, la oración y el ayuno, las obras de piedad: Háganlo, pero no para que los vean, sino para Dios; no para que los vean la gente, porque la recompensa verdadera, sólo viene de Dios. Y enseñó a sus discípulos el Padre Nuestro con sus siete peticiones, tres en referencia a Dios y cuatro en referencia a nosotros mismos. (Mt, 6, 1- 13) Nos invita a poner toda nuestra confianza en Dios y a buscar las cosas del Reino como una primera prioridad (Mt 6, 25- 34).

Tanto Jesús, como Mateo eran judíos y los dos conocían la ley de Moisés; conocían la historia de la salvación al dedillo. Jesús no se oponía a la Ley, sólo la superaba, pero no la contradecía, se oponía a la hipocresía de los fariseos que hacían de la Palabra de Dios, sólo tradiciones humanas (Mt 15, 6) El Génesis nos habla de dos árboles, (Gn 2, 17) Jesús habla de dos árboles (Mt 7, 16) Los profetas hablaron de dos caminos: los de Dios y los de los hombres. (Is 55, 6) Jesús habla de dos caminos: el ancho y el angosto (Mt 7, 16) El Deuteronomio nos habla elegir entre el bien y el mal (Dt 30, 15) Jesús nos habla de la puerta estrecha o la puerta ancha (Mt 7,13) Los profetas pelearon contra los falsos profetas (Amós 6) Jesús nos advierte: «Guardaos de los falsos profetas, que vienen a vosotros con disfraces de ovejas, pero por dentro son lobos rapaces. Por sus frutos los conoceréis. (Mt 7, 15- 16) Isaías habló contra el culto falso (Is 1, 16s) Jesús también se opuso al decirnos: «No todo el que me diga: "Señor, Señor, entrará en el Reino de los Cielos, sino el que haga la voluntad de mi Padre celestial. Muchos me dirán aquel Día: "Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre expulsamos demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros?" Y entonces les declararé:"¡Jamás os conocí; apartaos de mí, agentes de iniquidad!" (Mt 7, 21- 23)

El culto es inseparable de la Moral:  “Si, pues, al presentar tu ofrenda en el altar te acuerdas entonces de que un hermano tuyo tiene algo contra ti, deja tu ofrenda allí, delante del altar, y vete primero a reconciliarte con tu hermano; luego vuelves y presentas tu ofrenda”.(Mt 5, 23- 24)

Para Mateo la fe sincera es la que escucha la Palabra y la obedece, equivale a los principios de la moral en Isaías (Is 1, 16) Haz el bien, rechaza el mal y arrepiéntete: «Así pues, todo el que oiga estas palabras mías y las ponga en práctica, será como el hombre prudente que edificó su casa sobre roca: cayó la lluvia, vinieron los torrentes, soplaron los vientos, y embistieron contra aquella casa; pero ella no cayó, porque estaba cimentada sobre roca. Y todo el que oiga estas palabras mías y no las ponga en práctica, será como el hombre insensato que edificó su casa sobre arena: cayó la lluvia, vinieron los torrentes, soplaron los vientos, irrumpieron contra aquella casa y cayó, y fue grande su ruina.» (Mt 7,  24- 27)

Así hablaron los profetas como Miqueas y Jeremías: «Se te ha declarado, hombre, lo que es bueno, lo que Yahveh de ti reclama: tan sólo practicar la equidad, amar la piedad y caminar humildemente con tu Dios.» (Mq 6, 8) “pues una doble maldad | ha cometido mi pueblo: | me abandonaron a mí, | fuente de agua viva, | y se cavaron aljibes, | aljibes agrietados | que no retienen agua”. (Jer 2, 13)

Jesús está de acuerdo con Moisés, (La Ley) y los profetas (Elias) (Mt 17, 4). Todos hablan de lo que va a pasar en Jerusalén: Jesús va padecer, va a sufrir y va a  morir, pero al tercer día resucitará (16, 21)

Díceles Jesús: «Y vosotros ¿quién decís que soy yo?» Simón Pedro contestó: «Tú eres el Cristo, el Hijo de Dios vivo.» (Mt 16, 15- 16)

 

Publicar un comentario

Whatsapp Button works on Mobile Device only

Start typing and press Enter to search