YO ESPERO DEL ETERNO VUESTRA
SALVACIÓN.
Hijos, clamad al Señor: él os
librará de la tiranía y de la mano de vuestros enemigos. Yo espero del Eterno
vuestra salvación, del Santo me ha venido la alegría, por la misericordia que
llegará pronto a vosotros de parte del Eterno, vuestro Salvador. (Ba 4, 21b-22)
Baruck es el secretario de
Jeremías, es la época del Exilio. El pueblo ha sido llevado a una tierra de
servidumbre y de esclavitud, donde no hay templo, ni sacrificio, ni patria ni
rey, se encuentran lejos de Jerusalén que ha sido destruida y su templo ha sido
quemado, está en ruinas. El Exilio, duró 70 años (del año 586 al 536) En el
Exilio nace Ezequiel como profeta, había sido sacerdote, su trabajo es defender
la fe del pueblo de Dios, denunciar las idolatrías y anunciar los caminos de
Dios, al igual que todos los profetas de Yahveh.
¿Qué pueden hacer en el exilio? Pueden
invocara Dios, escuchar su Palabra, guardar sus Mandamientos y mantenerse con la
esperanza que un día, Dios les llevará de regreso a Casa, a la libertad. Escuchemos
a Sofonías decirnos:
"Aquel día no tendrás ya que
avergonzarte de todos los delitos que cometiste contra mí, porque entonces
quitaré yo de tu seno a tus alegres orgullosos, y no volverás a engreírte en mi
santo monte. Yo dejaré en medio de ti un pueblo humilde y pobre, y en el nombre
de Yahveh se cobijará el Resto de Israel. No cometerán más injusticia, no dirán
mentiras, y no más se encontrará en su boca lengua embustera. Se apacentarán y
reposarán, sin que nadie los turbe. ¡Lanza gritos de gozo, hija de Sión, lanza
clamores, Israel, alégrate y exulta de todo corazón, hija de Jerusalén! Ha
retirado Yahveh las sentencias contra ti, ha alejado a tu enemigo. ¡Yahveh, Rey
de Israel, está en medio de ti, no temerás ya ningún mal"(Sof 3, 11- 15)
Tanto Sofonías como Baruck están
dando mensajes de esperanza, la salvación sólo puede venir del Señor y viene. ¿Qué
hace Dios para sacarnos del Exilio? De la tierra de la servidumbre y de la
esclavitud, de la lejanía y de la separación de Dios (Is 59, 1) Cómo el hijo
pródigo que salió de la casa del Padre para irse a un país lejano. (Lc 15,11ss)
Ese país es el mundo, donde no es sagrado lo que en Casa es sagrado. Lo primero
que Dios hace envía una Palabra que es liberadora, Palabra de Vida, de Luz y de
Verdad. El que la escucha se pone de pie, sale fuera y se pone en camino de
Éxodo. Dios nos abre un camino en el desierto de nuestro corazón. Como en otro
tiempo abrió un camino en el mar. (Is 43, 16) Lo que según Ezequiel abrir
nuestras tumbas para que reconozcamos nuestros pecados (Ez 37, 12) Condición
para ser liberados.
Entonces en el desierto aparece
agua, jardines y bosques, el Señor camina con su Pueblo que lo lleva a la
Reconciliación. ¿Qué hace el Señor para reconciliarse con su Pueblo? Nos envía
su Hijo querido, viene a salvarnos, a sacarnos del pozo de la muerte y a
llevarnos al Reino del Hijo de su amor (Col 1, 13- 14) Jesús hace de la
voluntad de su Padre el alimento de su vida (Jn 4, 34) y abraza su Cruz con
amor para ofrecerse como un sacrificio vivo, santo y agradable a dios en favor
de toda la Humanidad (cf Rm 12, 1) Muere y resucita para reconciliarnos con
Dios y entre los hombres (Ef 2, 14) Muere para perdonar los pecados (Ef 1, 7) y
resucita para que tengamos vida eterna (Jn 6, 40; Rm 4, 25)
Ponernos en camino de Éxodo para ir
a la Tierra prometida que es Cristo Jesús que nos llama a salir del Exilio para
ir al encuentro con él, para intercambiar nuestras miserias con su misericordia:
"«Venid a mí todos los que estáis fatigados y sobrecargados, y yo os daré
descanso. Tomad sobre vosotros mi yugo, y aprended de mí, que soy manso y
humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas. Porque mi yugo es
suave y mi carga ligera.»"(Mt 11, 28- 30) Salgan del Exilio, vengan a mí,
(crean en mí) para que yo los libere, los reconcilie y los promueva. “De grandes
pecadores en hijos de Dios; de adversarios en discípulos de Cristo.” El Exilio
ha pasado lo que ahora hay es “Tierra Nueva” es “Nueva Creación” (2 de Cor 5,
17) “Donde abundó el pecado, sobreabunda la misericordia de Dios (Rm 5,20)
Ahora podemos cantar el cántico
nuevo y decir con alegría: Tú, Dios nuestro, eres bueno, leal y paciente, y con
misericordia gobiernas todas las cosas. La perfecta justicia consiste en
conocerte a ti, y reconocer tu poder es la raíz de la inmortalidad. (Sb 15, 1.
3) Dios ha hecho una alianza con su pueblo: "Yo te desposaré conmigo para
siempre; te desposaré conmigo en justicia y en derecho en amor y en compasión, te
desposaré conmigo en fidelidad, y tú conocerás a Yahveh."(Os 2, 21- 22)
Son los regalos del Novio a la Novia que es la Iglesia, somos nosotros. La
Palabra semilla de la santidad; el Perdón, manifestación de su Misericordia y
el conocimiento unido a la fidelidad. Ahora podemos escuchar las palabras de
Jesús:
"Así habló Jesús, y alzando
los ojos al cielo, dijo: «Padre, ha llegado la hora; glorifica a tu Hijo, para
que tu Hijo te glorifique a ti. Y que según el poder que le has dado sobre toda
carne, dé también vida eterna a todos los que tú le has dado. Esta es la vida
eterna: que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y al que tú has enviado,
Jesucristo. Yo te he glorificado en la tierra, llevando a cabo la obra que me
encomendaste realizar. Ahora, Padre, glorifícame tú, junto a ti, con la gloria
que tenía a tu lado antes que el mundo fuese. " (Jn 17, - 5)
"Por
lo demás, sabemos que en todas las cosas interviene Dios para bien de los que
le aman; de aquellos que han sido llamados según su designio. Pues a los que de
antemano conoció, también los predestinó a reproducir la imagen de su Hijo,
para que fuera él el primogénito entre muchos hermanos; y a los que predestinó,
a ésos también los justificó; a los que justificó, a ésos también los glorificó"
(Rm 8, 28- 29)
Publicar un comentario