Lecturas. Is 56, 1, 6-7; 1Ts 1, 1- 5; Mt 22, 15- 21.
"Para que todos los pueblos conozcan tu bondad" " y lleguen al conocimiento de la verdad" .
El Papa Francisco nos ha recordado que todo bautizado es un discípulo de Jesucristo. Esto me ayuda a entender que toda la Iglesia es enviada, es Misionera: Está en tensión misionera enviada a sembrar Vida en el corazón de los hombres y de las culturas, para que al escuchar la Palabra de salvación y creer en ella, entren en comunión con Dios en Jesucristo por la acción del Espíritu Santo. Está comunión es el alma de la Comunidad y la Comunidad es la manifestación de la Comunión.
La verdad es que muchos bautizados no viven su Bautismo y por lo mismo no están en comunión con el Señor. Más bien llevan una vida mundana, pagana, vida de pecado. El discipulado pide escuchar la Palabra de Cristo y obedecerla, pide además ser pertenencia de Cristo y de su Grupo, que es la Iglesia. Todo discípulo es llamado a estar en Comunión con el Maestro para aprender de él y un dia ser enviados por él y por la Iglesia con la fuerza del Espíritu para llevar la Buena Noticia hasta los rincones de la tierra.
Enviados a enseñar a otros lo que Jesús ha enseñado a los discípulos. Tres lecciones resumen la enseñanza recibida del mismo Jesús: a) "Enseñar a vivir en comunión con Dios, consigo mismo, con los demás y con la naturaleza. b) " Enseñar el arte de amar a Dios y al prójimo" y c) Enseñar el arte de servir. ¿Cómo enseñar? con el testimonio de vida y con la palabra.
La primera lectura de la Misa es de Isaías y nos recuerda la universalidad de la Salvación: "velen por los derechos de los demás". ¿Quiénes son los demás? Todos, los de afuera y los de adentro. Los ya bautizados y los que aún no lo están. "Los demás tienen el derecho a ser evangelizados para que reciban la Verdad del Evangelio, para que crean y vivan según la Palabra de Dios.
"Practiquen la justicia" Que la caridad pastoral, madre del celo apostólico nos haga preocuparnos por la la salvación de todos, para llevarlos al "encuentro con Cristo" y se inicien en su proceso de conversión.
La "justicia de Dios" está a punto de manifestarse: Justicia que se ha manifestado en Jesús el Hijo de Dios nacido para nuestra salvación. Justicia que se ha manifestado en la obediencia del Hijo de Dios que dio su vida para que nuestros pecados fueran perdonados y que resucitó para darnos vida eterna y hacer de los dos pueblos, judíos y gentiles un sólo pueblo. Gracias a la Manifestación de la Justicia de Dios, los que estaban lejos, ahora están cerca y lo que no eran pueblo ahora son pueblo y pueden ofrecer a Dios un culto en Espíritu y en Verdad. Los enemigo ahora pueden ser hermanos y llamrse juntos hijos de Dios.
Pablo, nos presenta a la comunidad de Tesalónica, como un Modelo de comunidades: "Han creído en Jesucristo y se aman uno a los otros. Son una Comunidad cimentada en la "Fe, la Esperanza y la Caridad",. Sus corazones llenos de la paz y de la gracia de Dios, pues aceptaron la Palabra de Dios no como palabra humana, sino como Palabra divina y se dejaron transformar por la fuerza de la Palabra para hacerse comunidad fraterna, solitaria, servicial y misionera.
De acuerdo a la pedagogía de Jesús, el discipulado nos pide: a) escuchar la palabra y aceptarla para creer en Jesús: (Jn 8, 31).b) "Permanecer en su Palabra (escucha y obediencia) para ser sus discípulos. c) conocer la Verdad que nos hace libres, el Amor. como fuerza humanizadora que irrumpe en nuestras vidas para transformarnos en Hijos de Dios, hermanos de los demás y servidores de ellos. Al discípulo Jesús, el Señor pide dos cosas esencialmente: " Ámame y Sígueme". Es decir, guarda mis mandamientos y mis Palabra (Jn 14, 21. 23) y configura tu vida conmigo para que tu vida esté adherida a la mía, mi Palabra sea norma para tú vida, mi Misión y mi Destino sean tuyos y puedas ser mi colaborador en la realización de la Obra del Padre.
El Evangelio nos presenta el encuentro entre dos poderes: Jesús y sus adversarios, fariseos y herodianos. La Luz y la tinieblas... le ponen una trampa: "Maestro bueno y sincero que enseñas la Verdad sobre Dios y sus designios.. Jesús les llama hipócritas, por que sus intenciones son malas y torcidas. Le hacen una pregunta: ¿está o no está permitido pagar el tributo al César de Roma?. Les pide una moneda y les pregunta ¿De quién es está imagen? del César le responden. La respuesta de Jesús es clara y concisa: "Den al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios".
¿A quién pertenece el Discípulo de Jesús? ¿A quién le pertenece todo lo bueno que hay en el m Discípulo? Todo Discípulo de Jesucristo es propiedad total y exclusiva de su Maestro: Su vida, su libertad, su tiempo, sus vienes materiales, morales o espirituales... Todo ha sido recibido como gracia.... para la propia realización y para la realización de los demás. "No te quedes con nada, entrégalo todo en servicio a los demás, especialmente a los más pobres. El Discípulo por gracia de Dios ha dejado de ser cueva de ladrones para ser casa de Dios, ya que está reproduciendo la imagen de su Maestro Jesús (Rom 8, 29) para poder vivir como Jesús que se pasó la vida haciendo el bien y liberando a los oprimidos por el diablo (Hech 10, 38). El Discípulo es portador del Amor de Dios y es enviado a irradiarlo en el rostro de sus hermanos los más pobres, los que no conocen el Evangelio o quienes tengan una necesidad concreta..
Palabras del Gran envío: "Todo poder se me dado en el cielo y en la tierra".."Cómo el Padre me envió yo los envió a Ustedes" "Vayan por todo el Mundo" "Proclamen, prediquen, enseñen. "Háganlos mis discípulos" "Bauticen los en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo" (Consagrados a Dios por Cristo en el Espíritu) "Enseñen los que yo les he enseñado" "Reciban el Espíritu Santo a quienes perdonen los pecados les quedan perdonados". La Misión de Cristo es la Misión de la Iglesia. De todos aquellos que creen en él, confían en él, le obedecen y lo aman, lo siguen y lo sirven. La Promesa: no estarán sólo, yo Jesús, su Maestro y Señor, estaré con Ustedes todos los días y en cada envío.No tengan miedo sean valientes.
Sólo podremos ser discípulos misioneros de Jesucristo si primero nos enamoramos de él y de su Iglesia. Sólo en la medida que lo amemos le pertenecemos y le servimos con libertad de espíritu. La Iglesia en Misión es Iglesia en Salida... Salir para llevar la Luz del Evangelio a los pobres, para llevar el alimento a los necesitados a los que han sido golpeados por el desempleo, los cismos o terremotos...a los excluidos... a los que viven en la ignorancia religiosa... Salir para ir al encuentro de personas concretas que necesitan de una manos amiga y fraterna..
No nos contentemos con ser creyentes, Hay que ser practicantes. No nos contentemos con ser practicantes hay que se discípulos de Jesucristo comprometidos con él en la construcción del Reino de Dios. Para que todo: pensamientos, palabras y obras sean una manifestación de la Presencia de Cristo en el corazón.Realizando la Misión descubrí el sentido de mi vida, el amor manifestado en Cristo Jesús nuestro Salvador y nuestra Salvación.
Publicar un comentario