TODO BAUTIZADO ES LLAMADO A SER SERVIDOR DE CRISTO.

 

TODO BAUTIZADO ES LLAMADO A SER SERVIDOR DE CRISTO.



Iluminación: He hallado a David, hijo de Jesé, hombre según mi corazón, quien realizará todos mis designios. (Hch 13, 22)-


Jesús es el iniciador de la revolución del servicio para combatir el poder  desordenado.

Mas Jesús los llamó y dijo: «Sabéis que los jefes de las naciones las dominan como señores absolutos, y los grandes las oprimen con su poder. No ha de ser así entre vosotros, sino que el que quiera llegar a ser grande entre vosotros, será vuestro servidor, y el que quiera ser el primero entre vosotros, será vuestro esclavo; de la misma manera que el Hijo del hombre no ha venido a ser servido, sino a servir y a dar su vida como rescate por muchos.» (Mt 20, 25- 28)-

se levanta de la mesa, se quita sus vestidos y, tomando una toalla, se la ciñó. Luego echa agua en un lebrillo y se puso a lavar los pies de los discípulos y a secárselos con la toalla con que estaba ceñido. Llega a Simón Pedro; éste le dice: «Señor, ¿tú lavarme a mí los pies?» Jesús le respondió: «Lo que yo hago, tú no lo entiendes ahora: lo comprenderás más tarde.» Le dice Pedro: «No me lavarás los pies jamás.» Jesús le respondió: «Si no te lavo, no tienes parte conmigo.» (Jn 13, 4- 8)-

Vosotros me llamáis "el Maestro" y "el Señor", y decís bien, porque lo soy. Pues si yo, el Señor y el Maestro, os he lavado los pies, vosotros también debéis lavaros los pies unos a otros. Porque os he dado ejemplo, para que también vosotros hagáis como yo he hecho con vosotros. (n 13, 13- 15)-

 

Lavar pies es servir, es compartir, es inmolarse, es sacrificarse en la presencia de Dios. Es donarse, entregarse para dar vida. Para lavar los pies a los demás hay que primero dejarse lavar los pies por Jesús, lo que significa dejarse liberar, perdonar, reconciliar y salvar por él. Hay que tenerlo como Salvador, como Maestro y como Señor. Toda la vida que está centrada en el señorío de Cristo está orientada hacia el servicio a Cristo y a la Iglesia. A Iglesia existe para servir a Dios y a los hombres; servir en referencia a la Salvación y al conocimiento de la Verdad (cfr 1 de Tm 2, 4)- No existe para servirle al Mundo, entendido este no como la Creación ni como la Humanidad, sino, como el sistema de doctrinas y de ideologías, que rechazan a Cristo, a su Mensaje y a su Obra. San Juan nos dice no amen al Mundo que ofrece Poder, Tener y Placer, amen a Cristo que ofrece Vida eterna y persecuciones para esta vida. (cfr jn 2, 15- 17; Mc 10, 3=)-

 

La vida eterna es el regalo de Dios para todo aquel que cree en Jesús como Salvador. Maestro y Señor. (cfr Jn 6, 40)-

En aquel tiempo, después de lavarles los pies a sus discípulos, Jesús les dijo: "Yo les aseguro: el sirviente no es más importante que su amo, ni el enviado es mayor que quien lo envía. Si entienden esto y lo ponen en práctica, serán dichosos. (Juan 13, 16-20)-  El discípulo de Jesús nunca deja de aprender y a su siervo lo que se le pide es que sea fiel a la Palabra, a su Mensaje y a su Obra[um1] [um2] [um3] .

 

Mateo nos dice: «No está el discípulo por encima del maestro, ni el siervo por encima de su amo. Ya le basta al discípulo ser como su maestro, y al siervo como su amo. Si al dueño de la casa le han llamado Beelzebul, ¡cuánto más a sus domésticos! (Mt 10, 24- 25)- El Maestro nos dice: El Mundo los odia porque ustedes me aman, si ustedes me odiaran el Mundo los amaría.  Si a mí me persiguen, también a ustedes los perseguirán. (cfr Jn 15, 18- 20)-

 

¿Cómo es el Maestro? Escuchemos a san Pablo decirnos: Pues conocéis la generosidad de nuestro Señor Jesucristo, el cual, siendo rico, por vosotros se hizo pobre a fin de que os enriquecierais con su pobreza. (2 de Cor 8, 9)- La pobreza es la Encarnación del Verbo en el seno de María (Jn 1, 14)- Es su Pasión, su dolor, su sufrimiento y su muerte, su pobreza nos hace ricos, es decir, nos hace hijos de Dios, hermanos y servidores de los hombres.

 

Tened entre vosotros los mismos sentimientos que Cristo: El cual, siendo de condición divina, no retuvo ávidamente el ser igual a Dios. Sino que se despojó de sí mismo tomando condición de siervo haciéndose semejante a los hombres y apareciendo en su porte como hombre; y se humilló a sí mismo, obedeciendo hasta la muerte y muerte de cruz. Por lo cual Dios le exaltó y le otorgó el Nombre, que está sobre todo nombre. (Flp 2, 5. 9)- Los sentimientos de Cristo son el ser l Hijo y el Siervo de Dios, el hermano universal de los hombres y el servir de todos-.

 

La clave para ser servidores de Cristo es el Encuentro con él para salir de las tinieblas para entrar en su Luz y dar frutos que permanezcan; frutos como la bondad, la verdad y la justicia (Ef 5, 7- 9)- La piedad, el amor fraterno y la caridad (2 de Pe 1. 7)- La humildad, la mansedumbre y la misericordia (Col 3, 12)-

 

La clave para el servicio es encarnar las Bienaventuranzas.

 

«Bienaventurados los pobres de espíritu, porque de ellos es el Reino de los Cielos. Bienaventurados los mansos, porque ellos poseerán en herencia la tierra. Bienaventurados los que lloran, porque ellos serán consolados. Bienaventurados los que tienen hambre y sed de la justicia, porque ellos serán saciados. Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia. Bienaventurados los limpios de corazón, porque ellos verán a Dios. Bienaventurados los que trabajan por la paz, porque ellos serán llamados hijos de Dios. Bienaventurados los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el Reino de los Cielos. Bienaventurados seréis cuando os injurien, y os persigan y digan con mentira toda clase de mal contra vosotros por mi causa. (Mt 5, 3- 11)-

 

Les digo esto ahora, antes de que suceda, para que, cuando suceda, crean que Yo soy. Yo les aseguro: el que recibe al que yo envío, me recibe a mí; y el que me recibe a mí, recibe al que me ha enviado". (Jn 13, 19- 20)-

 




 


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